jueves, 3 de agosto de 2017

Mallorca 1938, 1975...¿2018?

Resulta indudable que la colombofilia, como sucede con la historia, esta repleta de mil situaciones que la van limando. Como cualquier otra cosa en este mundo, todo evoluciona. El problema siempre fue el mismo: No todos son capaces de observar,percibir y adaptarse a los cambios cuando éstos suceden. Los hay rápidos de reflejos, muy rápidos, y otros que niegan la mayor por decreto. También los hay que siempre se dejan llevar.
Interesantísimo articulo de Juan Veny Sanso, profundizando sobre la realidad mallorquina de aquellos tiempos.




Pabs.

miércoles, 2 de agosto de 2017

75 días de entrenamiento para ganar un concurso de 1.000 km.

Nuestro gran amigo Bellani está de vuelta entre nosotros. Con el paso de los artículos ya le habíamos cogido algo más que cariño. Se le echaba de menos. Se desprende además tras la lectura del texto que era un buen colombófilo. Nunca lo puse en duda.
No obstante uno, tras digerir los párrafos, comprende lo que llevo lustros narrando aquí. ¡Los kilómetros no son iguales en todos los lugares de la tierra!. 
 Sin ir más lejos. Aquí con todo el potencial que tenemos, con más de cuatro décadas  de colombofilia activa en nuestras manos, somos incapaces de marcar desde 1000 km y el amigo Bellani no mete una ni dos, sino quince. Otro saltará. Claro Bellani tenía muy buenas palomas, jajajaja. ¿Que os puedo decir?. Si os resulta complicado leer entre líneas, no sigáis con el texto. No merece la pena.
Y es por ello que cuando uno entiende toda la canción, no es que ponga en duda la adquisición de una paloma belga, holandesa o alemana, sino que al cambio, tras pasar las aduanas y controles pertinentes, la paloma ya no parece la misma de hace dos días. Ella sigue siendo un buen animal, pero en el infierno todo parece tomar otras formas.
Me sonroja escuchar o leer cuando algún isleño adquiere una paloma que voló en tierra 10.000km o más y pretende que con eso sea suficiente. En fin, ya lo descubrirá usted mismo....

Con todos ustedes, el gran Bellani:





Pabs.

martes, 1 de agosto de 2017

Impresiones de un viaje a Bélgica.

  Corría el año 1975. Una España, que por aquel entonces despedía a Franco,  iniciaba lo que se conoce como la transición española. En ese histórico contexto situamos la historia de hoy, la de un viaje a la cuna de la colombofilia.
Una travesía que hoy en día muchos de nosotros podemos experimentar si está en nuestro ánimo. El destino y el objeto del desplazamiento son el mismo, pero las facilidades son otras, e indudablemente muchas cosas han cambiado desde entonces, incluso los protagonistas a los que se visitaba. El tiempo no perdona a nadie.
Recomiendo un viaje a la meca, al menos uno. Primero para conocer, ver, y escuchar, segundo, para que se os quite la "tontería" de magnificar cosas que no habéis visto, y tercero porque sólo saliendo de tu casa puedes entender lo que sucede en el mundo.
Tras la lectura de este auténtico tesoro, coincido en algunas de sus reflexiones, en otras no tanto. Algo absolutamente normal. Hace 42 años nuestras colombofilias estaban todavía más separadas que en la actualidad. De hecho, hay grandes palomas que dejaron su impronta histórica en nuestro país siendo ellas mismas palomas extraviadas de sueltas internacionales. Resulta obvio que en aquella época el acceso a buenas palomas para el colombófilo medio era casi una misión imposible. Aparecía una paloma belga pérdida en nuestro tejado y la familia colombófilia lo celebraba como si de un regalo de Dios se tratará. Miento, lamentablemente, esto sigue sucediendo, jajaja. 
  En definitiva, sólo los adinerados o aquellos que por cuestiones profesionales podían desplazarse al extranjero, accedían a aquellos animales que por aquel tiempo SI generaban diferencias porque nuestro país en temas plumíferos andaba en pañales. 
De ahí cabe recordar aquellos "San fermines colombófilos",   aquellas carreras para coger huevos en la suelta internacional de Barcelona. Algo que sigue sucediendo en la actualidad, pero hoy me sorprende más que ayer. Sí , sin duda hoy no le hallo el sentido, pero hace mucho tiempo que cedí en mi guerra por entender a la mayoría.

 Algo similar con aquellos que adquieren palomas en granjas tipo natural, o algunas de nueva creación (o no) en nuestro país. Si alguien compra en esas tiendas "chinas", en esos "todo a 100", su mayor problema no es adquirir esa paloma a buen precio sino que probablemente jamás entenderá  cómo funciona esto de la colombofilia. Ésta, podrá sufrir mil metamorfosis en los próximos 30 años, pero el cometido fue, es y será el mismo. Siempre habrá un puñado de excelentes palomas en una inmensa maraña de palomas inservibles. Y sólo la selección nos ayudará en esa guerra, y esa no se vende en ningún tipo de granja, digan lo que digan los pedigrees. ¡Ésa se hace!.
 O aquellos otros que adquieren una paloma ganadora en un derby porque el animal en ceustión lo merece (obvio) y porque en su pedigree observan muchas veces repetido el mismo nombre, pero en cambio obvian uno (no muy bien identificado) que es el que en realidad ha marcado decisivamente los acontecimientos genéticos de ese animal en concreto y su desempeño deportivo. Ir de "listillo" se paga. Tiempo al tiempo. 

Os dejo con esta joya con forma de artículo.  


 




Pabs.